Todo empezó cuando ví la imagen de esta camiseta a través de Pinterest (como casi todos mis proyectos empiezan...). Me pareció muy mona y perfecta para un hilo al que le tenía echado el ojo hace tiempo, el Cotton Viscose de Drops. Hasta el color lo teníamos en la tienda, pero al final decidí hacerla en color caldera porque el beige dorado se había terminado y ¡¡quería empezarla ya!!
El patrón de la camiseta está a la venta en inglés en http://quinceandco.com/collections/sparrow-2015-collection/products/azalea, pero a mi lo que me divierte es coger algo que veo por ahí y hacer algo parecido, que no igual, con la base de lo que he visto, así que... ¡manos a la obra!
Lo primero era elegir un calado para la parte de abajo de la camiseta, así que me puse a buscar por internet y encontré varios candidatos. Decidí probar con uno de hojitas que veía mono pero después de tejerlo, no me convenció para nada, lo que solo puede significar una cosa....
¡¡a deshacer!!
¡Vuelta a empezar! Para que luego digan mis alumnas que solo deshacen ellas... Esta segunda vez elegí un calado un poco más abstracto que encontré y que ha cuadrado perfectamente con la idea que tenía.
Este es el gráfico, sacado de http://www.knitting-bee.com/knitting-stitch-library/charts-only/lace-knitting-charts/lace-knitting-chart, solo que yo no lo he usado entero porque si no, me hubiera ocupado toda la camiseta, así que he empezado en la línea 9 y he terminado en la 39.
Una vez ya segura del dibujo, a echar puntos y a tejer para arriba!! No quería la camiseta tan ancha como la de la foto (aunque me gusta el vuelo), y además, con perspectivas de que el algodón de un poco de sí, eché puntos para que me quedara si no ajustada, normal.
Una vez terminadas todas las partes, quedan las tirantas por tejer. Ya terminada, os enseño el resultado antes de pasar por la plancha con vapor (de bloquear la camiseta). Lo enseño porque la gente se queda muy sorprendida del cambio que dan los tejidos antes y después del bloqueo y hasta que no lo ven, no lo creen. Además, este hilo especialmente, porque al tejerlo a mi me ha parecido difícil que quede uniforme de primeras, cualquier parón de un par de días significa una raya.
Lo único que hace falta para el cambio es una tela (yo uso una servilleta de algodón) mojada y escurrida. Se pone sobre la camiseta y se pasa la plancha a una temperatura adecuada para la fibra con la que hayamos trabajado. Yo no suelo casi ni apoyar la plancha sobre la tela porque no me gusta que el punto se aplaste, así que, se va pasando la plancha casi sin apoyar por encima del paño mojado esperando que suelte vapor. Con paciencia se va "planchando" toda la prenda.
Una vez bloqueada, se ve el cambio, ¿a que sí? Ya está lista para colocar.
¡Estoy bastante contenta con el resultado! Y creo que cuando esté morena (aquí sigo cada año engañándome y diciéndome que me pondré morena...) me favorecerá aún más!! :)
